Todos sabemos cómo la industria de procesamiento de carne luchó con los impactos de la pandemia desde el principio, cuando los brotes en las plantas de procesamiento más grandes del país interrumpieron la cadena de suministro y crearon escasez en los estantes de las tiendas de comestibles. Los agricultores y procesadores de New Hampshire experimentaron una demanda extraordinariamente alta de sus productos, pero encontraron su crecimiento limitado por la falta de trabajadores calificados y el alto costo de expandir su capacidad.

Las noticias del Departamento de Agricultura, Mercados y Alimentos de New Hampshire ayudarán a estos procesadores a superar algunas de esas barreras y desarrollar cierta resiliencia. El Programa de Infraestructura de Procesamiento de Carne (MPIP, por sus siglas en inglés) proporciona fondos que los agricultores locales y las instalaciones de procesamiento de carne y aves pueden usar para comprar, por ejemplo, una máquina para hacer hamburguesas de carne molida, una hielera o una cortadora de carne.  Los fondos también podrían usarse para ayudar a compensar los costos de un ahumadero o vehículos de reparto refrigerados. Las subvenciones apoyarán la eficiencia del ahorro de mano de obra, fomentarán los productos de valor agregado y proporcionarán inversiones de capital y otras mejoras de infraestructura relacionadas.